Presentación «Sin bragas y a lo loco».

Ser escritor tiene cosas muy bonitas: Imaginar personajes, enamorarte de ellos, odiarlos, acostarte y ser incapaz de dormir dándole vueltas al argumento de tu nueva obra… Pero la más bonita, la que hace que todas las noches de insomnio valgan la pena, sois vosotros.

Desde que empecé con esta aventura que supuso para mí «Sin bragas y a lo loco», he tenido la suerte de poder vivir dos momentos muy especiales. El primero de ellos, fue tener la oportunidad de estar en Sant Jordi (como muy bien explica mi compañera Lorena Pachecho en esta entrada), que también fue la primera vez que firmé un libro fuera de mi entorno de amigos, familia, etc. ¡Y la primera vez que quisieron hacerse una foto conmigo!

El segundo momento más bonito de estos últimos meses, fue el pasado viernes. Al fin pude presentar «mis bragas» en sociedad, y hoy vengo a contaros por qué para mí fue tan especial.

Estaba nerviosa. Reconozco que no me gusta nada hablar en público, pero parece ser que es un mal común a muchos autores (y ya se sabe, mal de muchos…). Faltaba media hora para que empezara la presentación y allí estaba yo, repasando mentalmente los esquemas que había preparado con todo lo que quería contar.

Hasta que empezó a llegar la gente.

Me arroparon. Allí estaban mis amigos, mi padre, mi genial compañero de editorial Jorge Cienfuegos, y la gente de Santa Teresa Librería-Café. No voy a decir que se me pasaron los nervios, pero sí me olvidé de aquellos famosos esquemas que llevaba cuidadosamente preparados. Preferí hablar sobre lo que sentí el día que mi editora me dijo que iban a publicar, cómo es eso de «escribir» y editar un libro. No quise enrollarme con el argumento, pero quise contar cómo me llegó la inspiración para empezar «Sin bragas y a lo loco» (¿Sabíais que fue un día normal mientras trabajaba viendo Los Serrano? :D). Expliqué por qué me gusta que Alicia sea una chica normal, con sus miedos y sus dudas, para que todas podamos sentirnos identificadas. Por qué elegí Oviedo, mi ciudad, y no otra que pudiera conocer más gente.

No sabéis lo que se siente cuando ves gente interesada. La ronda de preguntas se alargó, todos querían saber más sobre mí, sobre mi forma de enfrentarme a lo que escribo, sobre mi futuro, mis ambiciones, y un señor sentado en la barra preguntaba si seguiría adelante, cuánto había de Oviedo en mi libro, cuáles eran mis autores preferidos…

Entonces, llegó el turno de las felicitaciones. Y el señor de la barra que se levanta para darme la enhorabuena por atreverme a lanzarme, me acerca el libro que acaba de comprarse para que se lo firme a pesar de que no es su género favorito.

Sólo me queda daros las gracias, una vez más, por arroparme tanto, por la acogida, por vuestras palabras de cariño antes, durante, y después de la presentación. Sois enormes.

¡Y así de bonitas quedan mis bragas en el escaparate! 😀

Aprovecho para recordaros que el sábado Jorge presentará sus Monstruos en la misma librería, a las 19:00, y yo estaré allí para presentarle a él. ¡Os esperamos! 🙂

C.